Por: Pilar Peres Cernudas
En el atrio del templo de la Parroquia de Nuestra Señora de La Asunción, ubicada en la colonia “Parque de Manzanares”, se ha instalado una monumental escultura comisionada por el Padre Luis Alberto Navarro, al Maestro Carlos Terrés, de cerca de cuatro metros de altura y trabajada en terroca, con el tema de “La Santísima Trinidad”.
Los elementos de la escultura son: en la parte alta, una paloma con las alas desplegadas simbolizando al Espíritu Santo que proyecta rayos y siete flamas que representan los siete dones: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios. En la parte central, Dios Padre, sentado y con los brazos abiertos, portando en la mano izquierda un pergamino, y en la base, el elemento principal que es Cristo de pie, con las huellas de su pasión, invitando a tomar su yugo, que es suave.
A base de volúmenes y formas sugestivas, esta bella obra presenta el parecido de los rostros entre el padre y el hijo, iluminados por los rayos del Espíritu Santo, el misterio que encierra el tema de esta escultura que filosóficamente se puede conocer sólo mediante la fé, Dios “uno y trino”.
La escultura quedó instalada como una oración por todos los que la admiren, en una continua comunicación de amor, del actuar de Dios, que es una historia de la obra conjunta de las Tres Personas, donde cada una imprime acciones divinas con su característica personal. Como una familia amiga, en la que reconocemos la mano de cada uno de los miembros, por su huella personal dejada como un regalo único y precioso.