Nació en la Villa de Lagos el 26 de Junio de 1785 fueron sus padres don Pablo Anaya y doña María de Jesús Hermosillo. Juan Pablo Anaya dice don Agustín Rivera en su famoso discurso sobre los hombres ilustres de Lagos de Moreno fue de los primeros insurgentes laguenses desde 1810 en que se unió la padre de la patria, hasta 1818 militó bajo la bandera de la independencia unas veces en el estado de Michoacán, otras en el de Puebla y hasta en la lejana Oaxaca y en el ahora estado de Veracruz.
Primero fue capitán, después alcanzó pro su valentía al derrotar al español Laranizas en la Hacienda de San Eustaquio en Zacatecas al grado de coronel y llegó al de Mariscal de Campo pasando por muchísimos trabajos por lo que todos los historiadores hacen mucha mención de él.
Desde la consumación de la Independencia hasta su muerte causada por el cólera morbus el 24 de Agosto de 1850 fue honrado pro su patria con diversos empleos públicos y con el grado de General de División.
En la desdichada batalla de Puente de Calderón, recibió su bautizo de fuego heroico laguense, de allí acompañó a los héroes derrotados en su peregrinar hacia el norte y llega a ser lugarteniente de Allende, quien después de la derrota citada recibió de Hidalgo el mando supremo en la hacienda de Pabellón (en el ahora estado de Aguascalientes) Al conocer el plan de Iguala, lo secundó y se dirigió a México con el fin de ponerse a la orden del General Guerrero.
Siendo conocido de todos los insurgentes fue recibido con todos los honores que su heroísmo merecía por lo que entró triunfante a la ciudad de México con el ejército Trigarante el 27 de septiembre de 1821. En 1823 se le reconoció el grado de General de Brigadier y bajo la presidencia de Gómez Pedraza le dieron el grado de General de División y fue ministro de la Guerra (Enero de 1833 Diccionario de Historia, Biografía y Geografía) fue gobernador del estado de Tabasco (1846) también llegó al senado de la República. Fue enviado del gobierno Mexicano en una importante misión su brillante carrera militar y política quedó truncada al morir de 65 años de edad en nuestra ciudad.
Cuando leímos esta lista de actividades que desarrolló durante su vida don Juan Pablo Anaya, sentimos que fue uno de los más notables personajes de cuantos lucharon en la guerra de nuestra primera independencia así lo dicen varios historiadores contemporáneos.
Hace unos días estuvimos frente a la derruida tumba que guarda las venerables cenizas de quien cosagró su vida al servicio de la patria y no podemos creer que esté tan olvidado el sepulcro que contiene sus restos mortales, y no es remoto esperar que dentro de unos pocos años sus huesos sean cremados y el venerable sepulcro vendido, a otra persona como ya ha pasado con otros. Ante esto pensamos porque sus cenizas no han sido enviadas a alguna de las rotondas de hombres ilustres de México o Guadalajara, no vaya a pasar lo que con los restos del poeta don Francisco González León cuya sepultura se ha perdido así como la del poeta Ramón Iriate y otras de personajes que dieron gloria a las letras y las armas nacionales…