(NP).- Se veía venir, así lo habían pronosticado los vecinos y esto finalmente ocurrió ayer por la tarde la vieja barda que se ubicaba en la calle Allende entre Luis Moreno y López Cotilla, se vino abajo así de simple, no resistió más el paso del tiempo y con ello los vecinos se llevaron tremendo susto porque el estruendo al caer provocó aparte de la polvadera mucha inquietud sobre de quien o quienes podrían haber sido dañados por su derrumbe.
Desde hace varios años que los vecinos del lugar habían reportado que dicha fachada estaba por caerse que se tendría en su momento que hacer algo para evitar una tragedia pero únicamente se le colocaron unos polinos que sostenían o medio sostenían el inmueble en referencia a su fachada, lo cual finalmente este jueves no resistió y se vino abajo con los resultados ya descritos.
En lo que se refiere a la suerte el destino, Dios, o como usted quiera llamarle, no pasaban personas en esos momentos y todo quedó en eso en tremendo susto y alboroto por la caída de la misma de dicha finca marcada con el número 80 y el 364, autoridades correspondientes llegaron al sitio para levantar el reporte correspondiente.