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UNIERON SU VIDA CON LA BENDICIÓN DE DIOS LOS JÓVENES CLAUDIA Y MATEO

(NP).- Felices y llenos de ilusiones llegaron al templo para celebrar su matrimonio los jóvenes CLAUDIA y MATEO, quienes estuvieron acompañados de sus padres, familiares y amistades que se congratularon con éllos por tan importante decisión que han tomado al formar su propia familia.
Lo anterior fue en el templo de La Merced, en el cual fueron recibidos por el estimado Fray Daniel Prado Reyes el cual les condujo hasta el altar, donde se postraron para la celebración de la Santa Misa en la que hubo de parte del sacerdote un bello mensaje de cómo deben vivir de ahora en adelante su vida; pues este suceso que hoy están celebrando, les dijo, los marca en un antes y después porque al unirse al ser amado, están aceptando todo lo que conlleva vivir con su parte complementaria con la que han de formar su nueva familia, que esperamos, sea maravillosa y con ella se cumplan los planes propios de ustedes así como los planes de Dios.
Luego les preguntó: ¿Están ustedes aquí por su propia voluntad sin que nadie los obligara para celebrar el matrimonio? A lo que éllos contestaron: Sí, estamos aquí por nuestra propia voluntad. Entonces se prometieron amarse y respetarse todos los días de su vida; ser fieles en la salud y la enfermedad; y fueron bendecidos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y declarados marido y mujer, hasta que la muerte los separe, entregando el esposo arras a su esposa y anillos mutuamente.
Prosiguió la santa misa y hubo el lazo impuesto por sus padrinos y las oraciones al Creador para que Dios los acompañe, en esta nueva vida que hoy comienzan como casados.
Después sellaron este pacto de amor con la Comunión con Cristo Jesús, y concluyó la ceremonia con un cálido aplauso de sus invitados y luego abrazos y felicitaciones.
Finalmente, todos se retiraron a conocido centro social donde tuvo lugar la gran fiesta con rico banquete, música, vino para el brindis y el gran pastel de bodas que no podía faltar, así como muchos regalos para su nuevo hogar.
CLAUDIA Y MATEO: ¡QUE EL AMOR DURE TODA LA VIDA!

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