(NP).- Felices y enamorados llegaron hasta el altar, Dulce María y Brian, los que lucieron muy felices, elegantes y enamorados en este momento de su vida, en el que las ilusiones están por cumplirse, en el futuro por venir.
Los acompañaron sus padres don Camilo y Martha Sánchez por la novia; don Ramón y Aida León por el novio, así como sus muchos familiares y amistades que no podían faltar, entrando al recinto de Nuestra Señora de Guadalupe conducidos hasta el altar por el sacerdote don Sergio Sánchez Márquez, quien es familiar de la novia y presidió la sagrada celebración, en la que dirigió bello mensaje sobre el matrimonio a los contrayentes, el cual es un sacramento instituido por Dios, donde se santifica el hombre y la mujer con toda su familia.
Y luego de que vivieron el rito del sacramental y se hicieron las promesas de amor para toda la vida, los ahora esposos fueron apadrinados por don Roberto y Saira que con gusto aceptaron la invitación a esta ceremonia, en la que los recién casados han formado su propia familia.
Terminada la ceremonia, muchas felicitaciones y muestras de cariño recibieron los ahora esposos de todos sus acompañantes que vinieron de los E.U. y de nuestro país; después se dirigieron a un hermoso salón de fiestas donde festejaron en grande con música variada y de banda para el baile, banquete mexicano para sus 300 invitados, con los que brindaron por su felicidad y buena vida, la que esperan tener y gozar en este matrimonio con el ser amado.
Y así, pasaron las horas los regalos llegaban y la fiesta seguía, y llegó el momento de partir el rico pastel, al igual que iniciar su viaje de bodas, donde vivieron su luna de miel muy contentos.
¡MUCHAS FELICIDADES DULCE MARÍA Y BRIAN!