(NP).- Feliz y elegante se presentó en el templo de La Merced, la señorita YOLANDA YARELI MORENO ESPINOZA, para darle gracias a Dios porque le permitió llegar a su cumpleaños quince, el cual lo festejó con sus padres los señores Olivia y José Ismael, quienes muy orgullosos de ella le cumplieron su deseo de tener esta fiesta para el alma y el espíritu en tan señalado día.
El sacerdote celebrante la condujo hasta el altar de Dios, acompañada de todo su elegante séquito, entre los que estaban claro, sus padres, sus hermanos, tíos, primos, abuelitos y sin faltar sus grandes amistades y compañeros de la escuela, que también fueron invitados.
Un bello mensaje le dedicó el sacerdote a la jovencita, a la cual le sugirió que primero, que a su edad, hay que prepararse para la vida, para el servicio a los demás, ya que ese es el motivo de haber venido a este mundo; por lo que hay que seguir los consejos de papá y mamá, que son las personas que más nos quieren y jamás nos darán algún consejo que no sea para nuestro bién; cosa igual quiere Dios para todo aquel que se sienta hijo Suyo, pero Él si tiene todo para cumplirnos, por lo que hay que dejarnos consentir por nuestro Creador que quiere que seamos felices…
Después se prosiguió con la ceremonia, y llegó el momento cumbre en el que había que participar del Sagrado Banquete que Cristo le preparó a esta jovencita, pues nada menos que recibir como alimento el Cuerpo vivo de Jesús y también su Sangre según la fe en la que creemos desde el día que fuimos bautizados, los que nos llamamos cristianos.
Así fue, esta jovencita fue llena de gracias celestiales para que pueda seguir con su vida y llegar tan alto como ella quiera: ¡Pues con estas ayudas…!
Y al terminar la misa, los abrazos y muestras de cariño no se hicieron esperar para YOLA, la cual fue apapachada por todos sus invitados, quienes también la acompañaron en la fiesta que le ofrecieron sus papás en lo que es su hogar, donde se reunieron 400 invitados y hubo música de sonido, grupo y mariachi para el baile, así como el banquete mexicano que todos disfrutaron, sin faltar más abrazos y regalos para esta jovencita, que en este festejo vivió lo más bonito que le puede pasar a una quinceañera, que además es muy querida por Dios, por sus padres, su familia y amigos que la conocen.
Al partir el pastel la festejada, pidió un deseo, el cual, seguro que se le cumple, pues si la gracia de Dios la sigue acompañando, ella puede tener el mundo en sus manos…
¡MUCHAS FELICIDADES YOLITA!
